29 Abril de 2024 14:11
La rutina a veces es abrumadora: entre el trabajo, las cuentas, los deberes de los chicos y el tiempo de ocio, a veces la casa queda un poco desordenada. Pero gracias a la cultura japonesa, que es reconocida mundialmente por su enfoque en el orden y la limpieza del hogar, se pueden dedicar solamente quince minutos al día para que la energía cambie con la llamada Técnica Soji.
Esta línea surge de un ritual ancestral que promueve la limpieza y el orden como las vías definitivas hacia el bienestar emocional, en conexión total con la casa. De hecho, se dice que el hogar es el reflejo de quien la vive e incluso, la psicología sugiere que los espacios limpios y despejados ayudan a la mente a mantenerse atenta por más tiempo.
Este ritual, transmitido por el monje budista Shoukei Matsumoto, llamado "técnica Soji", invita a convertir la rutina diaria de la limpieza en el hogar en una práctica transformadora para el bienestar emocional. Con ello, según el monje, se liberan frustraciones, tristezas y todo aquello que la mente purga, de modo que solo quede espacio para la paz mental y que los espacios reluzcan, al igual que el alma de la persona que quiere llevar a cabo esta práctica.
Sin embargo, Soji no se refiere específicamente a la tarea doméstica de la limpieza, sino a crear hábitos que sean relacionados con el orden como una práctica espiritual para perfeccionarnos como seres humanos.
¿En qué consiste la técnica de 15 minutos?
Según el autor, es una práctica simple que comienza con la meditación para liberar el exceso y las distracciones. Además, Matsumoto ofrece una serie de recomendaciones para implementar Soji en la vida cotidiana, como mantener un espacio limpio y organizado desde la práctica de "hacer un poco todos los días, valorar lo esencial y establecer relaciones saludables consigo mismo y con el entorno".
Los beneficios de esta milenaria técnica implementada en Japón son diversos: además de mantener siempre un hogar limpio, ordenado y bien perfumado, ayuda mediante la meditación a liberar frustraciones y tristezas, a reducir el estrés y la ansiedad centrando la atención únicamente en el aquí y ahora.
En este sentido, según el monje, la limpieza es un gran canalizador porque al no ser una tarea tan complicada y muy mecánica, es saludable para establecer objetivos y saber cuándo algo es suficiente.
Consejos definitivos del Soji
- Reducí la cantidad de cosas que tenés en tu hogar. Llevá todos tus espacios de forma minimalista y quedate con aquellos objetos que verdaderamente quieras poseer.
- Tratá a tus objetos con amor. Captá su esencia y coloca cada cada cosa en el lugar que le corresponde.
- Si algo está roto o ya no sirve, tiralo. ¡Lo roto acumula energía negativa! Sin embargo, no te olvidés de agradecerle al objeto todo lo que ha hecho por vos.
- Adiós suciedad. Un espacio sin polvo ni platos sucios hará que tu mente se despeje.