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¡Ojo con esto! Los alimentos que no podés recalentar y cuáles jamás deberían entrar en tu freezer

Las composiciones químicas de cada producto y el riesgo de crecimiento bacteriano.

17 Febrero de 2025 10:02
Qué alimentos se pueden cocinar en el microondas.
Qué alimentos se pueden cocinar en el microondas. .

Hay ciertos alimentos que, por razones de seguridad alimentaria, es mejor no recalentar debido a cambios en su composición química o al riesgo de crecimiento bacteriano. Aquí hay algunos ejemplos:

  • Huevos Cocidos: especialmente las claras de huevo. Al recalentarlas, pueden volverse tóxicas debido a la liberación de proteínas potencialmente dañinas.
  • Arroz: el arroz cocido puede contener esporas de Bacillus cereus, una bacteria que puede sobrevivir al proceso de cocción. Si se deja a temperatura ambiente y luego se recalienta, estas esporas pueden proliferar, causando intoxicación alimentaria.
  • Papas: similar al arroz, las papas cocidas pueden contener esporas de Bacillus cereus. Además, si se han cortado o pelado antes de cocinarlas y no se almacenan adecuadamente, pueden crecer bacterias.
  • Espárragos: al recalentarse, los espárragos pueden perder sus propiedades nutricionales y desarrollar un sabor desagradable.
  • Setas (Hongos): pueden volverse gomosas y perder su textura y sabor al recalentarse.
  • Pollo: aunque no está estrictamente prohibido, el pollo recalentado puede perder calidad y textura, volviéndose seco. Además, si no se almacena correctamente antes de recalentarlo, puede ser un terreno fértil para bacterias como Salmonella.

En general, la clave para recalentar alimentos de manera segura es hacerlo rápidamente a temperaturas altas (al menos 74°C/165°F) y no dejar los alimentos a temperatura ambiente por periodos prolongados.

Sin embargo, para los alimentos mencionados, es preferible consumirlos recién cocinados o, si es necesario recalentarlos, hacerlo con mucha precaución, asegurándose de que estén bien cocidos y almacenados correctamente antes de recalentar.

De yapa: los alimentos que no podés congelar en el freezer

Aunque la mayoría de los alimentos pueden congelarse, hay algunos que no responden bien al proceso de congelación debido a cambios en su textura, sabor o calidad nutricional. Aquí hay una lista de algunos alimentos que generalmente no se recomienda congelar:

  • Productos Lácteos como yogur, crema y mayonesa: estos productos pueden separarse o volverse granulosos cuando se descongelan. La mayonesa, en particular, puede separarse o volverse acuosa.
  • Huevos en cáscara: los huevos en cáscara pueden explotar en el congelador debido a la expansión del líquido. Sin embargo, las claras y las yemas pueden congelarse si se sacan de la cáscara y se baten ligeramente.
  • Cremas o salsas a base de harina: las salsas espesadas con harina o almidón pueden separarse o volverse acuosas y granulosas al descongelarse.
  • Verduras con alto contenido de agua: como pepinos, rábanos, lechugas y otras verduras de hoja. Tienen una textura que se vuelve blanda y acuosa después de descongelarse.
  • Frutas con textura muy suave: como melón, uvas, sandía, y algunos cítricos. Pierden su textura crujiente y pueden volverse blandas y acuosas. Las fresas y los plátanos pueden congelarse, pero son mejores para usos como batidos o helados caseros.
  • Quesos blandos: quesos como la ricota, el queso cottage, o los quesos cremosos pueden volverse granulosos o separarse al descongelarse.
  • Patatas crudas: la textura y el sabor pueden verse afectados negativamente. Sin embargo, las patatas cocidas o puré de patatas se pueden congelar con mejores resultados.
  • Café y té: el sabor y aroma pueden degradarse significativamente. Aunque se pueden congelar granos de café o té en hojas, no se recomienda congelar café o té ya preparado.
  • Alimentos con alto contenido de aceite: como algunos aderezos para ensaladas o productos horneados que contienen mucho aceite, pueden volverse rancios o separarse.

Es importante recordar que, aunque estos alimentos no se congelan bien para consumo directo, algunos pueden ser usados en recetas después de descongelarse donde el cambio de textura no sea un problema (por ejemplo, puré de frutas en mermeladas o salsas). Además, siempre es bueno sellar bien los alimentos para evitar quemaduras por congelación y mantener la calidad al máximo.

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