27 Enero de 2017 08:17
Barron Trump es le más chico de los cinco hijos del actual presidente de los Estados Unidos, a sus diez años está a punto de convertirse en el primer hijo varón en casi 60 años en vivir en la Casa Blanca.
Criado por su propia madre Melania, sin ayuda de ninguna niñera, habla tres idiomas, inglés, francés y esloveno. Se dice apasionado del golf y, según su madre es “un chico muy fuerte e independiente”. Con un piso para él solo en la Trump Tower, parece estar sufriendo los embates de la carrera presidencial de padre, motivo por el cual su madre lo quiere mantener lo más alejado posible de los medios.
¿Y si nos tapamos la boca?
Las imágenes de Barron junto a sus padres, tanto en los actos de campaña, como en la asunción presidencial Barron no paró de dar la nota. Se tomó dos vasos de café en 10 minutos, hizo caras rarísimas y hasta mostró su aburrimiento. Casi somo todos los chicos de 10 años.
Los memes.
En noviembre del año pasado, el youtuber James Hunter sacó de sus casillas a Melania Trump. Publicó un video, titulado “Is Barron Trump Autistic? #StopTheBulliying” en el que se mostraba al menor de los Trump con conductas erráticas y desorientadas. La primera dama amenazó con demandar al autor del video y éste se disculpó y lo levantó, aunque declaró que él mismo es autista y quería que se tome conciencia sobre la problemática de las personas con TEA.
Fuera del protocolo.
Según datos de la OMS (Organizasión Mundial de la Salud) uno de cada 160 chicos sufren trastornos del espectro autista (TEA), que comienzan en la infancia y persisten hasta la adolescencia o la adultez. En algunos casos las personas con TEA pueden desarrollar una vida independiente, mientras que algunos casos más severos necesitan atención y ayuda de por vida.
Los TEA son un grupo de afecciones que presentan algún grado de alteración en el comportamiento social, el lenguaje y la comunicación, además de una cantidad de intereses y actividades muy pequeño, esteriotipado y repetitivo. El nivel intelectual varía de una caso a otro, pueden sufrir deterioro profundo o aptitudes cognitivas altas. Este tipo de afecciones, generalmente van acompañadas de otras como la epilepsia, depresión, ansiedad y trastornos de déficit de atención e hiperactividad.
Barron Trump, según sus padres, no padece autismo, al parecer, solo es un nene aburrido de ser parte de los actos políticos de sus padres.
